miércoles, 9 de julio de 2014

Escitalopram - va a ser que no

Hoy tenía cita en neurología. Las citas médicas se espacian mucho en el tiempo ya que el hospital que me toca está masificado (y aparte creo que mal gestionado, aunque no sea el asunto de esta entrada). Llevo un tiempo (años) que no descanso bien duerma las horas que duerma. Ya me han hecho la prueba del sueño (dormir en el hospital enchufado a montones de cables) varias veces. La consulta de hoy era para comunicarme el resultado de la última prueba.

Resulta que la prueba sale normal, es decir, no se aprecia ningún trastorno del sueño. Es más, me ha dicho la doctora que en esta última prueba, debido a que he perdido peso, ya no ronco, por lo que tampoco se aprecian problemas respiratorios. Le he comentado que me sigo arrastrando todo el día con mucha somnolencia. Ha seguido con una serie de preguntas para conocer mi estado actual, entre ellas comentar lo que me había dicho el psiquiatra cuando fui a verle.

Lo de la visita al psiquiatra fue hace un par de meses, tras mucha insistencia mía, porque pensé que conociendo los fármacos que usan, sabría que algunos antidepresivos producen un estado (lo que llaman anhedonia sexual) como el que tengo, mientras que hay algunos estudios de otros fármacos que, al menos en casos aislados, sí que han obtenido mejoras. Yo no he tomado antidepresivos nunca y sorprendentemente para mí, el psiquiatra no admitía los montones de efectos perjudiciales que tantas veces he leído. Fue una consulta sin más trascendencia.

Hoy, después de repasar mi historial, la neuróloga ha insistido en si no estaré deprimido, puesto que "es una de las pocas causas que se conoce que pueden provocar la anhedonia". Total, que me ha recetado escitalopram, que haga deporte, tenga una buena higiene del sueño y que vuelva dentro de unos meses a ver cómo estoy.

Yo no soy médico y no me conozco los nombres de todos los medicamentos. Simplemente al llegar a casa, he buscado qué tipo de antidepresivo es este. Veo que es un ISRS cuyos efectos secundarios afirman que son menos nocivos que los primeros que salieron... Pero no es necesario buscar mucho para encontrar descripciones de lo que producen.

Sinceramente, después de haber leído tanto en contra de los ISRS, no voy a tomarlo. Haré deporte, dejaré la cafeína, haré otras cosas, pero tomar un medicamento de este tipo me parece jugar con fuego. Me puedo equivocar, probablemente los médicos se enfadarán por no seguir el tratamiento que me ha mandado, pero lo único que me falta es tomar un medicamento de ese tipo y no recuperarme nunca... Porque ese es el verdadero problema: los efectos nocivos pueden durar un tiempo después de abandonar el medicamento, o incluso no desaparecer nunca. Ya se lo he dicho a varios y no son conscientes de lo que les digo. Es más, es que no lo van a mirar. ¿Cómo va a saber más que ellos alguien que simplemente lo ha visto en Internet? No sé más, simplemente lo he leído una y otra vez.

En cuanto a lo de estar deprimido, es que no me cuadra. Según ellos, la depresión puede causar anhedonia. A mí si acaso, me podría ocurrir al revés. Después de tanto tiempo con la anhedonia sexual, podría deprimirme. Si fuera una persona más sexual, probablemente se me podría haber ido la cabeza ya.

Me jode mucho no disfrutar del sexo, pero sigo opinando que es un problema sensorial y disfruto de otras cosas de la vida. Y no es que me niegue a hacer terapia psicológica: ya la hice y no funcionó (y tampoco me devolvieron el dinero). No entiendo que el corazón se me salga por la boca cuando veo a algunos hombres y sin embargo no siento ese placer físico. Tampoco entiendo que un asunto como este no se investigue... Pero a la medicina le quedan tantas respuestas por encontrar...

10 comentarios:

Serge dijo...

Hola redondeado, soy Serge. Al volver a leerte después de tanto tiempo he tenido un sentimiento encontrado. Por una parte me alegro de saber de ti, y saber a su vez que estás bien, dentro de las circunstancias que conocemos. Por otra parte, por un momento, y al ver tan larga ausencia, pensé que quizá el problema se había solucionado y que no querías volver a recordar viejos debates al respecto. Lamento que no sea así, de modo que te pondré al día sobre lo mío y opinaré de lo tuyo, si me permites. Empezaré diciendo que lo del sueño es posiblemente algo relacionado con la ansiedad. Una gasometría arterial podría confirmarlo. De todos modos, los médicos, como bien sabes, en cuanto oyen hablar de la anhedonia sexual en seguida piensan en la depresión, sin entender, como muy bien razonas, que es precisamente la anhedonia lo que podría hacer más probable que uno se desesperara dentro de unos cauces, y no a la inversa. Me hace gracia también que tengan tan claro el diagnóstico sin haber estudios científicos serios al respecto. Son diagnósticos sin base alguna. Yo intento huir de los antidepresivos. Sus efectos secundarios en todo mi sistema nervioso y en mi pene no han sido precisamente agradables. Mi experiencia de 25 años con este trastorno me ha hecho ver que, en este tema, los médicos, psiquiatras y psicólogos andan mucho más perdidos que yo mismo. La última vez que fui al andrólogo hace un año y medio le comenté lo de la fisioterapia del suelo pélvico. Él estuvo de acuerdo en que no perdía nada por probarlo y me recomendó un profesional al que todavía no he ido (un profesional que según me dijo, no habría visto nunca un caso como el mío, para variar). No me acabó de convencer, pues. Hay otro que parece mucho más experto, pero está en Madrid, así que por la crisis de momento, no me lo puedo permitir. Tengo además serias dudas de que la fisioterapia pudiera arreglarlo, pero tarde o temprano lo intentaré. No tengo prisa. Una cosa que he ido adquiriendo con el tiempo es la falta de urgencias al respecto. A estas alturas lo tengo bastante asumido. Es muy cierto que siempre está esa cosa latente, ese anhelo de sentir la sexualidad plenamente, pero con el tiempo se aprende a gozar mucho más de las cosas en vez de sufrir y lamentarse. Finalmente, hace unos meses tuve una supuesta infección en la próstata (y digo supuesta porque no me dolía nada, si bien es cierto que tenía muchas ganas de orinar y tenías los valores de la PSA significativamente elevados). Me recetaron SEPTRIN FORTE, y me sorprendió gratamente. Es el único medicamento en 25 años con el que he notado una mejoría. Y cuando hablo de mejoría no hablo lamentablemente de volver a sentir, pero sí que he notado una sensación de relax en la zona del perineo que no notaba desde hacía muchos muchos años. Es un antibiótico bastante potente, por lo que no se puede tomar a la ligera. De todos modos, cuando lo tomé acabé con la sensación de que si fuera un medicamento más suave, con el paso del tiempo y con una dosis mantenida, quizá hubiera surtido un efecto antianhedónico. Te recomiendo tomarlo al menos por probar, siempre bajo prescripción médica (requiere de análisis de sangre para ver que todo va bien). Una de mis teorías sobre lo que nos pasa, es que quizá tenga un origen infeccioso. A mi de joven me pasó como a una de tus seguidoras, que afirmaba haber sufrido pinchazos en el clítoris. A mi me ocurrió de joven que un buen día de noche noté un dolor indescriptible en el glande. Creo que es el mayor dolor que una persona pueda experimentar. A los diez minutos, por suerte, cesó de repente, tal y como había aparecido. Lamentablemente, me han ocurrido tantas cosas y ha pasado tanto tiempo que ya no sé situar exactamente dicho acontecimiento en la escala temporal, por lo que no estoy seguro de si me ocurrió antes o después de ser consciente de la anhedonia. Y en fin, esto es todo. Te envío un abrazo bien fuerte, y sintiendo que no te hayas recuperado todavía, me alegro mucho de volver a saber de ti. Un saludo cordial.

redondeado dijo...

Hola Serge.

Siento no poder aportar más luz a este problema, de momento. Es uno de los motivos que me hizo dejar de escribir... Aparte de que yo sólo puedo explicar lo mío, sin saber si se corresponde con lo que les pasa a otras personas y si lo que yo digo les ayuda o les perjudica. Pero tengo claro que si vuelvo a recuperar las sensaciones, lo comentaré y si pudiera ayudar a otros, me alegraría mucho.

Las consultas médicas van muy espaciadas y tampoco se encaminan en solucionar el problema sexual. Esta última y durante varios años han sido enfocadas a intentar ver si tengo algún trastorno del sueño. Lo que ocurre es que al ser los neurólogos los encargados de esto, también les comenté mi falta de sensaciones. Porque yo sigo opinando que lo que me falta es una sensación concreta que antes tenía, es decir una sensación que mi sistema nervioso ya no gestiona. Sin embargo, como esta parte de la medicina no está desarrollada, es muy complicado que encontremos algo. La verdad, yo con mejorar mi salud general y sentirme descansado, me daré con un canto en los dientes.

De momento creo que hasta después del verano no continuaré con la búsqueda, porque ahora se va todo el mundo de vacaciones, incluyendo los médicos. Empezaré a bajar el consumo de cafeína y si consigo hacer algo de deporte... Pues espero que algo mejoraré... Para cuando vuelva a la consulta a decirle que no he tomado antidepresivos.

En cuanto al tema de la fisioterapia de suelo pélvico, en una de mis múltiples consultas hace años me derivaron a uno (no sé si será el mismo que te han comentado, tendría que buscar el nombre). Dijo que no notaba disfunción, me cobró la consulta y poco más. Pasé por esa consulta enviado por un urólogo simplemente por descartar esa causa.

Lo curioso es que en mi cuerpo funcionan tantas cosas mal... Entre otras he perdido también parte de la sensibilidad para hacer mis necesidades, por lo que quizá debería tener problemas de suelo pélvico, pero no los detectan, igual que las otras cosas, porque debe ser que lo compenso de alguna manera... La verdad es que he tenido que aprender un poco a "hacer fuerza", no siento si he vaciado bien, etc.

El sexo de momento lo tengo lo más aparcado que puedo, porque lo paso muy mal... Como hemos dicho muchas veces, es ese problema el que nos puede minar la salud mental y no al revés, así que habrá que vivir en abstinencia... O casi.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Hola, redondeado

Soy Manuel, el estudiante de medicina. Voy a referirme a vuestro problema como PDOD, ya que es el término que usan en el video que enlacé. Voy a hacer un monográfico sobre los ISRS que es el motivo de tu entrada.

Me parece un error no tomar los ISRS. Aunque entiendo que te fíes poco de los médicos y que pienses que si no te han curado, por el mismo principio de desconocimiento de tu problema, aún te pueden joder más de lo que estás.

Los efectos secundarios sobre el sexo de los ISRS están muy documentados. Se describen como varios síntomas: reducción de la libido o el deseo, impotencia o dificultades para la erección, problemas en la excitación y para llegar al orgasmo, placer atenuado (lo que no implica necesariamente la ausencia de placer total o casi del PDOD). Lo he leído en 20.000 lugares, me lo han descrito muchos pacientes e incluso amigos y conocidos que los han tomado. Lo normal es tener varios de los síntomas de los que he enumerado, en diferente grado según la persona. Me parece una afectación global o general de la sexualidad. En cambio el PDOD parece algo más concreto. No sé si pueden tener alguna relación, pero desde luego no son lo mismo.

La actual generación de ISRS ha reducido mucho los efectos adversos y es seguramente de lo más seguro que te puedes meter en el cuerpo en cuanto a psicofármacos. Aún así si tienes un médico o psiquiatra medianamente bueno te tienen que advertir del posible efecto adverso sexual y te tienen que preguntar expresamente sobre el tema en las visitas de control sucesivas. El motivo de preguntar es que la bajada de la libido es el principal efecto indeseable (aunque la mayoría de los pacientes no tienen ningún problema). Si no se interroga expresamente sobre el tema sexual, muchos pacientes se callan, no sacan el tema por iniciativa propia. El no poder cumplir con la pareja es la principal causa por el que los pacientes deciden dejar el tratamiento a espaldas de los médicos, lo que lleva a la cronificación del padecimiento, recaídas, etc. En cambio si el médico tiene interés y pregunta, puede detectar el problema y modificar la dosis o discontinuar el tratamiento en fin de semana (para que el paciente pueda echar el polvete semanal).

Los efectos de los ISRS se consideran transitorios y me sorprende que haya gente que los considere permanentes. He visto en los comentarios de este blog que los que sufren el PDOD atribuyen su dolencia a una gran variedad de fármacos: ISRS, myolastan, finasteride, ansiolíticos. Fármacos con una gran extensión en la población y por eso es normal que los pacientes con PDOD hayan estado en contacto con ellos…. igual que todo el mundo, millones y millones de personas que no sufren PDOD. No digo que no sea cierto esa afirmación de la wikipedia de pacientes con efectos permanentes de los ISRS. Pero me parece algo rarísimo, extrañísimo, una afirmación un tanto aventurada y temeraria, que no encaja ni con lo que he visto en mis prácticas médicas, ni con la bibliografía que he manejado. En medicina las cosas hay que demostrarlas. En la wikipedia, no.

Anónimo dijo...

Continuo el mensaje anterior.

Los ISRS tienen efecto adversos sexuales, pero también curan problemas sexuales. Los ISRS se dan en una depresión mayor (en la que uno de los síntomas que arreglan es la ausencia de deseo o libido y la anhedonia) o en una fobia (p.ej con rechazo absoluto del sexo). Y en esos casos, los ISRS arreglan síntomas sexuales.

Piensa también que algunos de tus síntomas pueden ser compatibles con pequeños problemas psiquiátricos como una depresión menor, neurótica o reactiva (tienes un problema y por eso te pones triste), insomnio de la fase de conciliación del sueño, o una fatiga crónica. Esos síntomas pueden mejorar con los ISRS. Y a lo mejor alguno de esos problemas son los que te provoca el PDOD (¡¡pero no esperes que sea tan fácil!!)

Si el doctor que aparece en el video está en lo cierto y el PDOD es un problema de neurológico que se tiene que arreglar con fármacos (que no lo sé, habría que ver que ha publicado ese tío en revistas científicas y con que repercusión o índice de impacto), se debería empezar a probar con psicofármacos indicados para síntomas o problemas acompañantes, puesto que específico para el PDOD no hay nada (creo). Y no probar al tuntún, a lo loco, o sin ninguna base que es lo que comienza a hacer la gente de oídas cuando está desesperada.

Si los médicos creen que en tu caso está indicado ISRS, yo lo probaría 15 días sin tener grandes expectativas y después decidiría una cosa u otra en función de los resultados. Me parece un término medio entre tener una fe absoluta en los médicos o negarte en redondo por una fe absoluta en fuentes discutibles o menos rigurosas. Los motivos los he expuesto a lo largo de esta intervención. Además, puesto que no tienes una depresión galopante, seguramente te habrán prescrito dosis bajas.

Es tu cuerpo y es tu vida. Y me parece estupendo que los pacientes se informen, sopesen las cosas y tomen decisiones sobre las cosas que atañen a su salud.

Un abrazo.

Serge dijo...

Hola Anónimo, gracias por tu respuesta. Redondeado no es una persona de respuesta rápida, así que si me permites, te daré mi opinión de usuario de su foro. En primer lugar, agradecer tus palabras y tu interés. En segundo lugar, decirte que las personas que sufrimos este trastorno, al menos por lo leído en este foro y en foros similares internacionales, no consideramos que tengamos depresión mayor. Antes al contrario. Como bien apunta redondeado, es la situación de anhedonia la que causa desasosiego, y no al revés. Yo, por ejemplo, no creo que tenga depresión mayor, ni tampoco fobia al sexo. Probé hace muchos años un antidepresivo (anafranil) que me sentó como un auténtico tiro. Como comprenderás, no tengo muchas ganas de ir probando esto o lo otro, en cuanto a medicamentos psiquiátricos, sobretodo cuando absolutamente ningún estudio corrobora que la anhedonia sea causada psíquicamente. Que los medicamentos puedan causarla, es indudable, pero eso no demuestra nada. También pueden causar la muerte en algunos casos. El problema es la asunción de que es psiquiátrico por el mero hecho de estar absolutamente perdidos. Yo no he leído de nadie que se haya curado con antidepresivos, al menos, en el caso de que la anhedonia sexual no sea causada por éstos. Créeme que nuestras experiencias personales con los médicos son desoladoras. A mi una uróloga se me rió en la cara en una ocasión cuando le expliqué lo que me pasaba. No creo que haga falta continuar. Aparte de esta mala experiencia, he ido a los que podrían considerarse los mejores centros médicos del país, entre ellos la Fundación Puigvert, reconocida mundialmente. Decirte que mi andrólogo JAMÁS ha tenido un caso como el mío. Es un buen doctor y agradezco su apoyo, pero respecto a soluciones, ninguna. Y sobre posibles causas, ninguna. Ganas de investigar, desde un punto de vista científico, ninguna. Nuestra vida como pacientes se limita a esperar que en alguna parte del mundo, alguna persona de nuestra condición encuentre una solución efectiva y la haga pública para compartirla. También nos gustaría contactar con un doctor con ganas de investigar seriamente sobre el tema, compilando casos similares y desarrollándolo científicamente. Quién sabe si quizá algún día puedas ser tú. En cualquier caso, gracias nuevamente por tu interés.

redondeado dijo...

Hola,

Siento no comentar más a menudo... Ya he dicho más de una vez que no sé si en algo puedo perjudicar a otras personas (por ejemplo si empiezan a identificarse con síntomas que no tienen) y eso me frena.

Manuel: muchas gracias por escribir. No sé ni qué especialidad médica querrás escoger, pero lo que quizá sí que puedes hacer, si es que el tema te parece digno de ser investigado, es comentarlo en la facultad y en los círculos médicos, en la medida de tus posibilidades. Puede que le pique la curiosidad a alguien más y se acabe investigando, aunque pasen unos cuantos años. Se supone que este blog era para intentar conseguir algo de visibilidad, aunque de momento los resultados son bastante limitados.

Por cierto, que hace tiempo me escribió también otro estudiante de medicina a mi correo, aunque ahora no logro encontrar los mensajes. Me comentó que tenía este mismo problema, pero que no consideraba interesante la vida sexual... Y que no le parecía una limitación para su vida puesto que tenía muchos otros intereses. Es curioso lo diversos que podemos llegar a ser.

Había leído acerca del vídeo que mencionas y del doctor Irwin Goldstein a través del foro ejaculatoryanhedonia.com, pero hasta ahora no lo había visto. Muchas gracias. Dentro de la poca información que hay, algún médico sí que intenta dar más pasos, pero esto es como otra de esas llamadas enfermedades huérfanas... Lo único positivo de lo nuestro es que al menos no es mortal, aunque yo lo considero una pérdida de calidad de vida y que dificulta establecer una relación.

Yo comprendo que estudiar medicina es muy duro, que cada cual busca su carrera en el área que más le interesa y es difícil atender a otras cosas... Pero esa es la situación: por una parte, en la Seguridad Social he tenido mala suerte, primero con ese urólogo que comento, y después con otros médicos que en serio, no buscan información más allá. Y de verdad que se lo he pedido por favor y con educación. Aparte están las esperas de meses entre cada consulta de pocos minutos, con lo cual cuando llego a ellos, tengo la sensación de estar en un examen en el que la puedo pifiar a la mínima... Porque pasarán otro montón de meses antes de que pueda volver a verles. No sé si me explico.

Por otra parte, en la sanidad privada normalmente han llegado a un punto en el que me han hecho todas las pruebas que se les ocurrían, y después no han sabido cómo continuar, así que me he quedado bastante parado. Además hay que andar con pies de plomo, porque cuando las sociedades médicas se enteran de que tienes patologías, te proponen amablemente el irlas excluyendo de tus coberturas o te cancelan la póliza...

Creo que todavía tengo algún hilo de donde tirar... Algún médico sí que ha mostrado una chispa de interés que estoy intentando perseguir... Aunque nuestros medios son limitados si no recibimos ayuda externa.

En cuanto al tema de los ISRS, sé que te parece un error que no los tome, pero para mí es algo de lógica pura. No sé si yo habré hecho algo para perder la sensación de placer, pero si un medicamento puede producir el mismo efecto, no me quiero arriesgar. A la neuróloga se lo comenté con toda la humildad que pude, que sabía los efectos que podían producir ciertos medicamentos y que en cambio había alternativas a ellos. Y aun viéndole cómo dudaba, porque leyó el prospecto, me lo recetó. De verdad que siento si te ofende... De momento es la decisión que he tomado. Cuando vuelva a la consulta y ya me obligue con el látigo a tomarme la drogaína, lo mismo me lo pienso ;)

Y bueno, supongo que me dejo muchas cosas en el tintero... Así que ya continuaremos por aquí o en otras entradas. A lo mejor alguien quiere proponer algún tema concreto...

Abrazos.

Antonio dijo...

Hola, me llamo Antonio, y como no estoy seguro de donde comentar, lo hare aqui, en el ultimo post con la esperanza de que esto lo vea mas gente. En cualquier caso sé que es posible que el autor no lea el comentario porque ya han pasado varios meses desde la publicación, pero si alguien con el mismo problema lo ve, sientase libre de contestar. Mi caso es el siguiente: Yo nunca he sentido placer como tal al eyacular, como máximo el alivio, ese sentimiento de liberar tensión. Por esto no estoy seguro de si es adecuado que comente aqui; de todas formas, los sintomas me parece que son los mismos, soy competente sexualmente en todos los aspectos excepto por esta condición en concreto. Para mi, es un problema mucho menor que para el autor porque como se dice, no se puede echar de menos algo que nunca se ha tenido. Naturalmente, noto que me estoy perdiendo algo muy grande en la vida, pero no suelo darle importancia. Estoy completamente seguro de que no es un problema psicológico tal como yo entiendo la palabra, porque desde que empecé a experimentar sexualmente (mas por amigos y parejas que por propia iniciativa) a corta edad, esta situación se ha mantenido igual: unos 8 o 9 años hasta hoy. Por último quiero decir (por si sirviera de algo, que nunca se sabe) que soy sexualmente activo, exclusivamente porque me gusta hacer disfrutar a mi pareja. Lo mas seguro es que no pueda ayudar mucho, pero creo necesario que se hable de esto sin complejos. Perdonad las erratas pero escribo desde el movil. Un saludo, mucha animo y quedo a vuestra disposición.

Serge dijo...

Hola Antonio. Este es un lugar adecuado para exponer tu problema, puesto que es precisamente, con más o menos diferencias, lo que nos ocurre a todos. En tu caso tienes la “ventaja” que no saber lo que te pierdes, lo cual casi es mejor que estar sufriendo por su pérdida. Yo sentí sólo en la adolescencia y la sensación fue bajando hasta la insensibilidad total. De esto hace ya 25 años. Al principio era desesperante. Después inicié un camino en busca de cura, que hoy continúa, pero sin mucho entusiasmo. Con el tiempo, uno se acostumbra a aceptar esta condición, a pesar de no perder nunca la esperanza de que algún día se resolverá, por vía médica, o quizá espontáneamente. Quién sabe. Por último, hablar sin complejos podría ser una buena terapia en caso de que el mal fuera de origen psicológico. Pero a pesar de la creencia de algunos médicos, yo sigo siendo muy escéptico a ese respecto. Un saludo, y bienvenido.

redondeado dijo...

Hola a todos. Sí que sigo leyendo los mensajes, aunque muy muy de tarde en tarde, dado que no me he tropezado con ninguna solución. No se me ocurre qué más escribir... Aparte de seguir recomendando intentar mejorar la salud en general.

En cualquier caso quien quiera, puede sentirse libre de comentar aquí cualquier tema, o proponer que hablemos de algo en concreto. A mí me gustaría que esto llegase a la comunidad médica y a partir de ahí, si alguien quiere investigar, yo estoy dispuesto a colaborar con mi escaso conocimiento del tema, pero explicando todas mis sensaciones.

Sigo convencido de que al menos en mi caso, es un mal funcionamiento del sistema nervioso... Con todas las dificultades que ello conlleva, dado que parece haber pocos conocimientos sobre cómo funciona el cerebro.

Me parece curioso que habiendo conocimientos sobre el dolor y cómo tratarlo, no exista información similar sobre el placer y por qué desaparece del conjunto de sensaciones. Casi todo lo que encuentro acerca del placer no se trata del placer físico propiamente dicho, sino de otras cosas como la satisfacción, el deseo, la anticipación... Casi todo relacionado con la psicología más bien. Me da la sensación de que divagan, en lugar de comprender algo tan básico como esto:

Si me doy un golpe con un martillo en un dedo me duele. Si no me doliera, tendría algún problema en el sistema nervioso, ¿verdad?.

Si me acaricio el glande (o el clítoris, o cualquier zona erógena) siento placer. Si no lo sintiera, tendría algún problema en el sistema nervioso, ¿verdad? Siento tener que hablar tan claro y por favor, confíe un poco en que le estoy contando la verdad y no me divague con historias psicológicas.

En fin, espero que sigáis bien dentro de lo que cabe, y que continuéis buscando la salud.

Anónimo dijo...

Yo tengo 45 años y desde los 18 no e vuelto a sentirplplacer en la relaciones sexuales de echo por este motivo me separe hace años ya q mi mujer decía q era por ella q había perdido el interés en alguna ocasión e sentido algo pero muy poco y las veces q se lo e comentado al medico me dice q puede ser por un trauma en la infancia mañana voy a consulta con un psiquiatra a ver si tomando medicación y relajándose y quitándome la anhedonia consigo algo positivo aunque estoy echo a vivir con ello